En los últimos dos años, México ha descuidado el aprovechamiento y el desarrollo de trabajadores con talento, aquellos con habilidades y aptitudes que aportan su conocimiento al sistema económico, por ello en ese periodo cayó 11 lugares del ranking de capital humano que elabora el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), al pasar del sitio 58 en 2015 al 69 en el reporte de 2017.
Si bien México se encuentra a la mitad del ranking, en el lugar 69 de 130 países analizados, con una puntuación de 61.8 por ciento de aprovechamiento del capital humano, aún está por debajo del promedio mundial, de 62 por ciento.
EL documento destaca que invertir en potencial humano, en el contexto de la Cuarta Revolución Industrial, es uno de los desaños políticos, sociales, económicos y morales "más importantes" que enfrentamos, expuso el organismo.
En su Reporte Global de Capital Humano 2017. Preparando a la gente para el empleo del futuro, expuso que de los 130 países analizados sólo 25 han aprovechado y empleado más del 70 por ciento de su talento humano, el cual es el factor más importante para el éxito de una nación a largo plazo.
Por ello, el Foro Económico Mundial indicó que es necesario promover el desarrollo de una educación que se adapte a las necesidades del futuro, una fuerza de trabajo mejor preparada ante los cambios en el mercado laboral, oportunidades de creación de empleo y estructuras que permitan que las ganancias y las oportunidades sean compartidas por igualdad de género, edad u origen.
22 países de la región Latinoamérica y el Caribe están por debajo del promedio mundial, con una puntuación regional de 59.86 por ciento, y por debajo de la zona de Asia-Pacífico, debido a un complicado panorama educativo, la dificultad laboral para las generaciones jóvenes y las carencias en el tema de calidad de vida.
Según el reporte México es el noveno país latino mejor ranlteado; sin embargo está por debajo de naciones como Argentina, que ocupa el sitio 52; Chile en el lugar 53; Perú en el 66 y Colombia en el 68; además de otros como Panamá, Uruguay, Bolivia y Costa Rica.
Si bien el país tiene niveles comparativamente bajos de desempleo, incluso entre su generación joven, se encuentra en un entorno de trabajo diversificado y complejo. Por ello su desempeño es insuficiente en la generación de oportunidades de empleo, basadas en las competencias de su población y en la construcción de talento humano para la próxima generación en términos de calidad educativa, diversidad de habilidades y capacitación del personal, factores que son exitosos en el entorno económico y laboral emergente.
Fuente: Ericka Pedrero/ La Razón
