Durante el último punto del orden del día de la sesión de Consejo General del INE, consejeros y partidos dieron el adiós a los trabajadores que se acogieron al Programa de Retiro Voluntario, entre ellos Migue Ángel Solís, director de Organización Electoral, y cuatro de sus colaboradores. 

Alrededor de 600 trabajadores decidieron terminar su relación laboral con el INE, entre ellos 123 trabajadores del Servicio Profesional Electoral. 

Solís fue fundador del IFE en 1991 y, tras 28 años de labores en distintos puestos, solicitó entrar al Programa de Retiro que, entre otras cosas, le otorgará tres meses de salario, 20 días por año trabajado, pago de vacaciones no descansadas con días de salario y un reconocimiento de entre 30 a 70 días de salario adicional, de acuerdo con los años de labor dentro de la Institución. 

Para este programa el INE utilizará 398 millones de pesos de su Fideicomiso de Pasivo Laboral. /Excélsior