El diputado federal (PAN) Carlos Alberto Valenzuela González presentó una iniciativa de reforma constitucional para disminuir la jornada laboral de 8 a 7 horas, la semana de trabajo de seis a cinco días y aumentar los días de vacaciones para quienes laboren en el gobierno federal.
Trabajar más tiempo no significa que ser más productivo, señaló el panista José Ramón Cambero al argumentar el proyecto ante el pleno de la Cámara de Diputados.
Al contrario, dijo, tiempos prolongados repercuten negativamente en la salud física y mental. También les quita tiempo de descanso. Todo esto, al final, “va en detrimento del trabajo de calidad y que no necesariamente están vinculados a salario digno y suficiente”.
La propuesta consiste en modificar el Artículo 123 constitucional. Tanto en el apartado A –que incluye a quienes laboran para la iniciativa privada—, como en el B –para trabajadores del gobierno-, en el que quedaría establecida una jornada laboral de máximo 7 horas. La nocturna, que actualmente es de 7 horas, se reduciría a 6.
En dicho artículo constitucional, sobre el derecho al trabajo, se estipula actualmente que la semana laboral es de hasta seis días con uno de descanso. Los legisladores del PAN quieren fijarla en cinco días y dos de descanso obligatorios para toda la población trabajadora.
También plantean aumentar cinco días de vacaciones a quienes laboran en el gobierno federal. Actualmente tienen derecho a por lo menos 20 días de asueto al año. De aprobarse la reforma, tendrían 25.
Motivos para reducir las horas sobran
Esta reforma es para “los trabajadores no de esta época, sino del futuro”, apuntó José Ramón Cambero ante el pleno de la Cámara de Diputados. A nivel global, estas iniciativas están tomando fuerza, “e incluso el Ejecutivo federal ha puesto el tema en la posible agenda nacional”, recordó.
El mercado laboral mexicano requiere de políticas que permitan reducir la informalidad, indica la iniciativa encabezada por el diputado Carlos Alberto Valenzuela. Se necesita crear más empleos formales, pero de calidad, con sueldos dignos y condiciones de trabajo que permitan el desarrollo personal y profesional de las personas, apunta.
Mejorar los horarios de trabajo repercutiría en la competitividad, sostienen. El Foro Económico Mundial ubicó a México en la posición número 51 de 138 países en este indicador, por debajo de países Latinoamericanos, como Panamá y Chile. “Datos preocupantes, si nos consideramos el mercado número 11 del mundo”, afirman los legisladores.
Otra ventaja que traería reducir las jornadas laborales sería regenerar el tejido social, aseguran. Desde la óptica económica del trabajo, un factor de la descomposición de las comunidades son los amplios horarios laborales. “Que los trabajadores pasen más tiempo y mejor tiempo con sus seres queridos”, ayudaría incluso a disminuir la delincuencia, sostienen.
“El trabajo debe adecuarse a las necesidades no sólo salariales, sino de convivencia social, salud y tiempo de las personas”, afirman los diputados panistas. Sin embargo, entre los países que integran la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), México es el que tiene en promedio más horas trabajadas al año, con 2,225. Estado Unidos, por ejemplo, está en el lugar 16, con 1,783.
Esas horas que pasan en el lugar de trabajo, hay que sumarle el tiempo de traslado. En el caso de la Ciudad de México, “6 de cada 10 viajes tardan de 31 minutos a 2 horas”.
Otro aspecto a considerar es que la gente tendrá que trabajar más años para alcanzar una mínima pensión. “Las proyecciones señalan que para el año 2050 la población mayor de 65 años en México será del 25%”. Físicamente, será difícil que puedan tolerar 8 o más horas de trabajo diario, descansando un día a la semana o día y medio, subrayan los promoventes de la iniciativa.
El proyecto de reforma a la Carta Magna tendrá que ser discutido y dictaminado por la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados.//Factor Humano
