Las empresas enfrentan un triple  reto en medio de esta pandemia que no tiene fin: retener su talento, atraer nuevo talento y levantar el decaído sentimiento de lealtad ante la crisis que vivimos. 

Para Jorge Hernández, consultor en talento humano las compañías tienen que ser muy creativas y hacer un esfuerzo económico y organizacional a pesar de la adversidad. 

Por ejemplo, sugirió, diseñar un paquete de beneficios emocionales pueden generar grandes frutos en un entorno tan complejo que se vive por la pandemia. 

"Tal vez dentro de este paquete de beneficios emocionales puede incluirse un día con media jornada laboral y que la tarde quede libre para la convivencia familiar o el descanso. O un día libre con pago de sueldo otorgado según resultados quincenales o mensuales. O porque no, apoyo emocional para la familia vía remota para enfrentar la nueva realidad que vivimos. 

"Un paquete de beneficios emocionales es una prestación que no cuesta mucho y fortalece la lealtad a la empresa", destacó. 

Hernández recomendó también generar puestos de trabajo movibles, es decir, que su desempeño se haga de manera presencial o remota, a través de una computadora portátil e internet. 

"Esa flexibilidad por muy simple que parezca tiene un impacto positivo en el ánimo de los empleados porque saben que se prioriza la rentabilidad de su trabajo más que una presencia física y se da un mensaje de que su salud, seguridad y comodidad es una prioridad para la empresa", explicó. 

Pidió no cancelar los planes de compensación que se conforman con un paquete de beneficios. 

"Es verdad que las compañías deben reducir sus costos, pero no es una buena idea que los planes de compensación desaparezcan. Deben mantenerse y ajustarse si es necesario a través de un diálogo directo con los empleados. En esa acción hay un mensaje de: "somos un equipo y de ésta saldremos adelante". Es entonces cuando se fortalece el sentido de pertenencia", insistió.