Lograr las mejores prácticas laborales es un ejercicio que no admite atajos. Su implementación llevará resultados positivos y más que necesarios que primero se verán reflejados en mejorar el ambiente de trabajo y alcanzar mejores indicadores en la productividad.
Otro aspecto al que se llega tiene que ver con el sentido de pertenencia que se logra entre el capital humano; La estrategia o acción que se realice, llevará también a un ámbito de protección de los trabajadores y además, permitirá a la empresa cumplir con las obligaciones a su cargo contenidas en las leyes locales y federales.
La adopción de nuevos procesos de mejora en el manejo de recursos humanos lleva consigo también un dosis de status por destacarse con diversos distintivos, tales como ser una empresa socialmente responsable, o familiarmente responsable.
Ello, porque las relaciones laborales desarrolladas con apego a las mejores prácticas permitirán un desenvolvimiento armónico y un equilibrio del vínculo jurídico creado entre la empresa y los trabajadores.
A continuación, varios aspectos que no hay que perder de vista como mejores prácticas laborales:
- Brindar oportunidades laborales a personas con discapacidad.
- Favorecer la equidad de género.
- Generar códigos de ética.
- Informar y difundir normas laborales.
- Promover planes de carrera.
- Establecer políticas de incentivación y motivación para el personal.
- Brindar prestaciones superiores a las de la ley
- Otorgar valor agregado a los programas de capacitación.
- Prestar atención a servicios de salud en el lugar de trabajo.
- Regularizar y respetar condiciones de contratos individuales y colectivos de trabajo.
- Crear planes de escalafonarios
