Si está teniendo pesadillas, los sentimientos de frustración con su vida podrían estar desencadenándolas.

Ese es el hallazgo de unos investigadores cuya evaluación de 310 personas encontró que las frustraciones y las emociones asociadas con ciertas necesidades psicológicas afectaban a sus sueños.

Las personas cuyas necesidades de independencia, de sentirse conectadas y de sentirse competentes no estaban satisfechas se sentían más frustradas y tenían más pesadillas o sueños con emociones de tristeza o de enojo.

Cuando se les pidió que interpretaran sus sueños, estos participantes eran más propensos a usar palabras negativas que las personas que sentían que sus necesidades psicológicas estaban satisfechas.

El estudio británico aparece en una edición reciente en línea de la revista Motivation and Emotion.

"Las experiencias sobre las necesidades psicológicas en la vigilia realmente se reflejan en nuestros sueños", dijo la autora principal del estudio, Netta Weinstein, de la Universidad de Cardiff, en Gales.

"Las emociones negativas de los sueños podrían resultar directamente de los eventos estresantes del sueño, y podrían representar el intento de la mente de procesar y comprender las experiencias que le resultan psicológicamente muy difíciles en la vigilia", explicó en un comunicado de prensa de la revista.

El estudio también encontró que las personas que se sentían frustradas con sus vidas tendían a tener sueños recurrentes en los que caían, fracasaban o eran atacadas.

"Los investigadores y los teóricos han argumentado que los sueños recurrentes desafían a las personas para que procesen los problemas más acuciantes de sus vidas, y se podría pensar que éstos resultan de su fracaso de adaptación a las experiencias difíciles", comentó Weinstein. // Fuente:  New York Times