El sector público federal ha ejercido 34 mil 246 millones de pesos en la compra de medicamentos para la población entre enero y septiembre de 2019, lo que implica un subejercicio de 7,029 millones de pesos o 17 por ciento frente el presupuesto modificado y autorizado para ese periodo, revelan cifras de la Secretaría de Hacienda.
La entidad más castigada por el retraso en el gasto en medicinas ha sido el ISSSTE, pues de los 11,229 millones de pesos autorizados para gastar a septiembre, ha ejercido únicamente 5,336 millones, lo que implica un subejercicio de 52.5 por ciento.
Con esto, la entidad que dirige Luis Antonio Ramírez ha tenido un menor gasto por 5,893 millones de pesos, que representa el 83 por ciento del subejercicio de todo el sector público federal. En el caso del IMSS, el subejercicio ha sido de 1,075 millones de pesos o 4.0 por ciento, pues ha ejercido 25,840 millones de los 26,915 millones que le fueron autorizados a septiembre.
La Secretaría de Salud sí ha tenido un mayor avance en su gasto en medicinas, pues su subejercicio es de 0.6 por ciento, al haber gastado 1,987 millones de pesos de los mil 998 millones autorizados. Para el resto del gobierno federal, poderes autónomos y empresas públicas, el retraso en el gasto en medicinas alcanza 49.8 millones de pesos, es decir 4 por ciento del total autorizado.
CAMBIO EN COMPRAS
Judith Méndez, investigadora de Salud y Finanzas Públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), explicó a Excélsior que detrás de los retrasos en el gasto en medicamentos están los cambios que se han realizado desde el gobierno federal a las compras.
Influye todos los cambios que han hecho de la dinámica de las compras consolidadas para combatir la corrupción. Pasa que, si te retrasas un mes, luego arrastras el subejercicio por varios meses. Te puedes regularizar en un mes determinado, pero siempre llevarás otros de retraso, por eso el persistente subejercicio”, comentó Méndez.
Es normal que haya subejercicios, en años anteriores también los ha habido. Pero lo que sí sorprende es el porcentaje tan alto en el ISSSTE. Hay que investigar eso a fondo sobre la operación del Instituto, y cuando el director comparezca tiene que decir por qué ha habido tanto retraso”.
Sobre la creación del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y su relación con la compra de medicamentos, Judith Méndez dijo que no resolverá los problemas estructurales, pues no quedan claras las fuentes de financiamiento.
Ahora es una atención a toda la población abierta que no tiene seguridad social, sin límite de tratamientos ni límites en cuanto a medicamentos. Si bien se usó parte del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del antiguo Seguro Popular, no será suficiente para financiar todos los retos del Insabi. Ningún país, por más universal que sea su sistema de salud, tiene ilimitado la cantidad de tratamientos o de medicamentos que otorga, así que no creo que la compra de medicamentos vaya a cambiar mucho con el nuevo instituto”, comentó Méndez.
La investigadora del CIEP afirmó que más que hacer las cosas desde cero en cuanto a compra de medicamentos, hay que atender las recomendaciones sobre la materia que ha hecho la Auditoría Superior de la Federación. /Dinero en Imagen