El Pulso Laboral

Lunes 25 mayo 2015

02:30 pm

Seguridad Social

Alertan por síndromes geriátricos

Por: Claudia Cervantes

La vista y el oído son los sentidos que en la vejez se ven en promedio 50 por ciento disminuidos, lo que hace necesaria una política pública de prevención y atención en los adultos, llamó Miguel Ángel Higareda, investigador del Instituto Nacional de Geriatría. 

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), en México el principal síndrome geriátrico que reporta la población de edad es el déficit visual (47.4 por ciento) y el segundo, el déficit auditivo afecta al 42.9 por ciento de los adultos mayores y se incrementa con la edad; las caídas, que pueden relacionarse con los anteriores son altas, se presentan en 34.8 por ciento de las personas adultas mayores.

Las afecciones que padecen los adultos mayores son los denominados síndromes geriátricos, cuadros clínicos habitualmente originados por enfermedades con alta prevalencia, se presentan de forma atípica, generan incapacidad funcional y social como el déficit visual o auditivo, y afecta aproximadamente al 90 por ciento de los adultos de vejez avanzada. 

“El maltrato que es consecuencia de la condición de salud, dependencia y vulnerabilidad de este grupo de población, está presente en dos de cada 100 adultos mayores”, alertó. 

Como lo señalan las estimaciones, al año 2050 la tercera parte de la población en México serán adultos mayores y prevalece un preocupante déficit de profesionistas para atender a este sector con servicios de calidad.

La discapacidad se plantea como una condición de vida más latente de presentarse en el futuro. Ello debido, a que la población está envejeciendo y el riesgo de adquirir alguna discapacidad se incrementa. 

En la actualidad son muy pocos los profesionistas dedicados a este tema, ya que de acuerdo con el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores hay 400 geriatras en todo México.

Aunado a ello se requieren en gran medida en México de especialistas que estén capacitados para trabajar con estimulación cognitiva y las enfermedades que conlleva el envejecer.

“Es necesario conocer todas las formas para prevenir, tanto a nivel cognitivo como a nivel físico, con la finalidad de que las personas adultas mayores logren tener un envejecimiento exitoso y una calidad de vida digna”, llamó.

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