Retraimiento, falta de apetito, falta de interés, dormir durante muchas horas y falta de apego a tratamientos, pueden ser síntomas de depresión en adultos mayores.

Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Instituto Nacional de Geriatría, reconoció que fin de año y Navidad es una época donde la sintomatología depresiva puede recrudecerse.

“Lo cierto es que es un tema dentro de la familia al que hay prestarle particular atención, porque los síntomas no son tan claros”, dijo.

En términos de personas mayores, la tasa de prevalencia de síntomas depresivos alcanza hasta al 40 por ciento de la población en mayores de 60 años. Sin embargo, la prevalencia de depresión mayor no es distinta de la que se da en otras edades que es de 4 a 5 por ciento.

“El retraimiento, la expresión de la depresión entre la gente mayor es un pocos distinta de otras edades de la vida y con frecuencia se expresa a través de sintomatología física, que se atribuye a descompensación de otras enfermedades y no necesariamente se reconoce”, explicó el médico internista y geriatra.

No es raro que la persona mayor vaya buscando atención para alguna dolencia como puede ser la espalda y en el fondo de esa condición tiene más que ver con una sintomatología depresiva que con una afectación física.

México tiene información de las cohortes de este grupo de población a través de la Encuesta Nacional sobre Envejecimiento, lo que indica que la proporción de depresión no ha variado mucho en los últimos 15 años.