El Pulso Laboral

Lunes 25 mayo 2015

02:30 pm

Sindicatos

Trabajadores de NISSAN buscan destituir al líder sindical de la CTM por la CROM

Por: Redacción/ El Pulso Laboral

Al menos 250 trabajadores de Nissan A1 y A2, integrantes de un segundo grupo disidente que exige la remoción de Gabriel Jasso como su dirigente sindical, se reunieron en La Exedra para recibir al presidente estatal de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), Jesús Enrique Ramírez Pérez, para solicitar formalmente el cambio de central obrera y desligarse de la Confederación de Trabajadores de México (CTM); ahora es un “Movimiento Cromista”.

Luego de esperar otro de los líderes más visibles de los disidentes que se manifestaron a las afueras del Palacio de Gobierno el pasado 2 de noviembre, Rafael Salado, al no haber acudido se hizo evidente de que el grupo al que pertenece tratará de llegar también a la dirigencia sindical; es decir, que son dos los movimientos con el mismo objetivo, más el único, pero con distinta central obrera: uno el de la CROM y el otro presuntamente respaldado por la CTM.

Aunque en las primeras entrevistas con los trabajadores no se hizo evidente cuáles serían otras de sus demandas, además del cambio de dirigente sindical y de central obrera, al transcurso de la mañana manifestaron que otra de sus demandas importantes es la igualdad en el tabulador salarial, pues el sindicato nunca se ha pronunciado por mejorar sus condiciones de trabajo ni en su pago; lo cual trae como consecuencia que ganen hasta el 50 por ciento menos de lo que se paga en los mismo puestos en Cuernavaca, Morelos, lo cual lo consideran como una situación desproporcionada.

Si bien el objetivo de los trabajadores era que el movimiento disidente fuera uno solo, a fin de mostrar más fuerza en el cambio que buscan, e ir incluyendo a los trabajadores de Nissan Uno y Dos, además de Jatco Uno y Dos y Compas, que representarían alrededor de cinco mil trabajadores, y aunque aseguran tener representantes en todas las plantas, es evidente que ya existe una división.

Al destacar que no tienen nada en contra de la empresa, pues lo único que desean es un cambio de dirigente, ya que el actual no les representa, al considerar que es el problema que tienen de raíz y que una vez que logren este objetivo, de este se desprendan los beneficios para los trabajadores, que desde su perspectiva no se han dejado ver.

Reiteraron que, si bien su intención es exigir enfáticamente su derecho al cambio de líder sindical, este se realizará de manera pacífica, desmintiendo que hayan amenazado con paros laborales para lograr su objetivo.

Jaime Ramírez, el ex trabajador de Nissan que fue despedido tras la exigencia de paro en la empresa durante la primera de las manifestaciones de obreros el 2 de noviembre, insiste en convocar a la rebelión, la contraparte que inició la petición de destitución de Gabriel Jasso al frente del Sindicato de la ensambladora, optó por aceptar la petición de la empresa y de la CTM para que la elección se lleve a cabo en mayo próximo como marcan sus estatutos. Ahora, el otro grupo disidente definió otra vía tras la desilusión que les provocó las decisiones de Salado al integrarse a la CROM.

En tanto Gabriel Jasso y su comité, al obviamente no estar dispuestos a dejar el sindicato que han dirigido durante 22 años, hacen proselitismo discreto en las plantas A1 y A2 de Nissan así como en Compas, a fin de lograr, nuevamente, su reelección./La Jornada

también te puede interesar