Ante las quejas laborales presentadas por Estados Unidos, el sector patronal del país pidió al gobierno de México sea un defensor de sus empresas ante la posible injerencia de organizaciones y liderazgos externos, que pudieran obedecer a intereses ajenos a los trabajadores para afectar la competitividad y alejar los capitales del país, sobre todo del sector automotriz.
José Medina Mora, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), comentó que el gobierno de Estados Unidos ha establecido toda una estructura institucional para vigilar que se cumplan los acuerdos del tratado comercialentre los tres países de América del Norte, y a través de las denuncias contra México, bajo el supuesto de no cumplir con la ley laboral, podrían propiciar competencia desleal, que desalentaría la inversión en nuestro país.
“Debemos cuidar que este tipo de acciones no propicien una competencia desleal y que terminen por afectar la competitividad de las empresas mexicanas o que desalienten la inversión de las empresas trasnacionales que hasta hoy privilegian a México sobre Estados Unidos y Canadá”, alertó.
A través de un comunicado, el dirigente de los patrones en México instó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador a “poner especial cuidado ante la posible injerencia de organizaciones y liderazgos externos que, obedeciendo a intereses ajenos a los de los propios trabajadores, puedan incitar a problemas laborales que afecten la operación de las empresas establecidas en el territorio nacional y trastoquen los acuerdos comerciales alcanzados entre Canadá, Estados Unidos y México”.
Por tanto, es indispensable emprender un manejo correcto y ético de los mecanismos de respuesta rápida para la atención de quejas laborales, y que estas sean bien fundadas y motivadas, con el objetivo de evitar que se conviertan en un instrumento de ataques a la competitividad de las industrias en nuestro país.
Para la Coparmex es primordial el respeto a la Ley Federal del Trabajo y que se garantice el respeto a la voluntad de los trabajadores en sus procesos sindicales, ello ante las quejas presentadas por el gobierno de Estados Unidos bajo el necanismo de respuesta rápida establecido en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) que involucra dos empresas asentadas en México.
“Desde la instalación de los mecanismos de respuesta rápida, se virtieron una serie de declaraciones de líderes sindicales, primordialmente de los Estados Unidos, en los que advertían que presentarían quejas laborales en contra de empresas mexicanas. No es un secreto que el principal interés de estas organizaciones, es que las fuentes de trabajo creadas en México y que han salido de sus países, regresen ante la pérdida de sus fuentes de empleo y membresía, destacando entre éstas un interés muy particular en ciertas ramas industriales como son la automotriz y minería, entre otras”, refirió Medina Mora.
