El 61.2 por ciento de los trabajadores ocupados en México ganan a lo más 2 salarios mínimos, es decir 8 mil 502 pesos mensuales.

El total de ocupados en el país es de 52.9 millones de personas, según datos del INEGI. Esto significa que 32.2 millones tienen salarios precarios.

El escenario empeora cuando observamos que de estos 32.2 millones, 13.4 millones gana apenas un salario mínimo, 4 mil 251 pesos al mes.

De esta manera, las familias mexicanas enfrentan serias dificultades para subsistir.

Si consideramos una canasta básica mínima compuesta por 8 productos: pan, leche, huevo, arroz, queso, carne, frutas y verduras, productos que cubren las necesidades nutricionales mensuales de una persona adulta promedio, observamos que el costo al mes es de mil 769 pesos que equivale al 39.8 por ciento del valor de un salario mínimo.

Esto sin considerar los gastos que un trabajador debe cubrir para su familia como: servicios: luz, gas, teléfono, salud, educación, entre otros.

Carlos Villarreal, economista de la UNAM aseguró que los trabajadores están abandonados a su suerte.

La pandemia no solamente arrojó a millones al desempleo, destacó, sino que precarizó al extremo la situación laboral de millones más.