Moody’s Investors Service advirtió que si bien el consumo en México se está recuperando del profundo impacto que generó la pandemia del covid-19, el estímulo proporcionado por el gobierno federal ha sido bajo y una mejor perspectiva dependerá del nivel de empleo de los salarios reales.

De acuerdo con la agencia calificadora, a pesar de la recuperación económica, los salarios reales (ajustados a la inflación) se están contrayendo y si esta disminución continúa, las perspectivas para el consumo se debilitarán.

En un documento, explicó que los indicadores de inflación subyacente (la que excluye los precios de bienes y servicios más volátiles, como agropecuarios y energéticos) muestran que la inflación está consistentemente por encima de la meta del banco central.

En particular, el aumento de los precios de los alimentos y la energía afecta a la mayoría de los presupuestos de los hogares en México y el crecimiento de los salarios se mantuvo durante la peor fase de la pandemia, pero ha habido un giro a la baja en los últimos meses y, a medida que la pandemia avanza, los empleadores pueden recurrir a recortes salariales.

Además, abundó Moody’s, los trabajadores del sector informal, que ganan menos que sus contrapartes del sector formal, también están expuestos a este riesgo; así, el efecto combinado de los recortes salariales nominales y los precios más altos afectará a la capacidad de consumo de los hogares, especialmente en artículos discrecionales.

Vacunación:

Con respecto al proceso de vacunación, la calificadora señaló que, a la fecha, México ha vacunado completamente a alrededor de 16 por ciento de su población y aunque las vacunaciones están aumentando, es poco probable que México cumpla con los umbrales de inmunidad colectiva para fines de 2021.

Destacó que la tasa de mortalidad sigue siendo muy alta (por encima de 9 por ciento), muy por encima de la de los países pares y el tercero más alto del mundo, lo que apunta a deficiencias en el sistema de salud pública mexicano.

Moody´s indicó que el programa de vacunación del gobierno mexicano emplea vacunas de CanSino, Oxford/AstraZeneca, Pfizer/BioNTech, Sinovac y Sputnik V, pero la efectividad de las vacunas chinas es menor que la de las otras, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) aún no ha aprobado el uso de emergencia de Sputnik V y algunas de las vacunas aprobadas pueden requerir dosis adicionales para reforzar la inmunidad contra nuevas variantes de virus.

En este contexto, considera que una disminución en la tasa de mortalidad del covid-19 contribuiría a mejores niveles de confianza, aunque los riesgos siguen siendo altos, a medida que nuevas variantes del virus continúan propagándose a nivel mundial. /// Milenio