Domingo 14 de agosto 

Grandes empresas siguen utilizando el outsourcing de manera inadecuada, faltando a los principios de trabajo digno y de cumplimiento con el pago de impuestos; de ahí que "se tiene que normar la industria para poder dignificarla", dijo Mónica Flores, directora de ManpowerGroup.

En entrevista en el marco de la entrega del reconocimiento que realizó el Colegio de Contadores Públicos como “La mujer destacada del año de México y Latinoamérica en los negocios”, la directiva se refirió al llamado que realizó la Comisión Permanente del Congreso de la Unión para conocer la situación en la que se encuentran los trabajadores contratados bajo el esquema de outsourcing, del que dijo “tener una normatividad obligará a cumplir ciertas reglas para dignificar el empleo, respetar los derechos de los trabajadores y entonces tener un bienestar social”.

El miércoles pasado, la Comisión Permanente pidió a la Secretaría de Trabajo y Previsión Social presentar un informe sobre la situación actual de los derechos laborales de las personas contratadas bajo el régimen de subcontratación, llamado outsourcing.

De acuerdo con el dictamen se pretende establecer los mecanismos necesarios para evitar que las empresas de subcontratación mantengan prácticas de simulación en el cumplimiento de prestaciones y derechos laborales, como el de seguridad social y crédito para vivienda (IMSS e Infonavit).

Aunque en el país no se tiene una cifra precisa del número de trabajadores que son subcontratados, contratados por una empresa para prestar sus servicios a otra, el Senado informó que México ocupa el quinto lugar en América Latina como país que utiliza la figura del outsourcing y un número de trabajadores aproximado de 4.9 millones.

Flores, quien tiene a su cargo 170,000 empleados, dijo que “esta acción del Senado es oportuna". "Lo que no se debe hacer es satanizar una industria por malas prácticas de un grupo. Lo importante es hacer cumplir a cabalidad la ley”.

La autorización de una Norma Oficial Mexicana en la materia se sumará a la reforma laboral del 2012, para “avanzar en la formalización de los empleos”.

_{Fuente: El Economista}