Sábado 21 de mayo 2016
En la Ciudad de México, la depresión y ansiedad que se da entre los ciudadanos de debe a la inestabilidad económica en el país que dificulta encontrar un empleo, las aglomeraciones de la capital y la inseguridad.
Debido a que no muchos se atienden, no existe la cifra precisa de los capitalinos que las padecen, pero alrededor de 40 por ciento de las consultas psicológicas y psiquiátricas están relacionadas con trastornos afectivos, según el doctor encargado de un Programa de Salud Mental.
Los padecimientos incluidos en los trastornos afectivos son la depresión y la bipolaridad; los segundos más frecuentes son los ataques de pánico y ansiedad, el trastorno obsesivo compulsivo y de adaptación. Después se encuentran las enfermedades que tienen que ver con el consumo de sustancias debido a la dependencia o males orgánicos.
Alrededor del 70 por ciento de los casos son detectados cuando el paciente acude al doctor por otro malestar.
El psiquiatra del gobierno señala que “los trastornos mentales más frecuentes son minimizados por la gente” y explica que se debe un poco a que las personas no creen que sea un problema de salud, sino cuestión de echarle ganas, cuestión de debilidad que hay que fortalecer, que las personas “tratan de sacar adelante el problema para evitar el estigma”.
En la Ciudad de México, el encargado de la Salud Mental, comenta que el presupuesto que se otorga es de tres por ciento del total asignado para salud en el país, ascendiendo a 6 por ciento del PIB nacional representando 2.3 millones de dólares para salud mental.
Además señaló que la cantidad de personal es insuficiente, mal distribuido y la mayoría de ellos están concentrados en hospitales psiquiátricos.
En las últimas décadas la depresión y el intento de suicidio, son trastornos que han crecido notablemente en la capital entre 1990 y el 2012 pasando de 2.2 a 4.7 por cada 100 mil habitantes.
Fuente: Joaquín López Dóriga/Con información de El País
